El GTM analiza la desinformación en ciencia y salud en el contexto de la COVID-19

08 de abril de 2021
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El Grupo de Trabajo Multidisciplinar (GTM), que asesora al Ministerio de Ciencia e Innovación y apoya al Gobierno en materias científicas relacionadas con el COVID-19 y sus consecuencias futuras, analiza en un nuevo informe la desinformación, entendida como la falsificación voluntaria de la información recibida por la ciudadanía, que “se ha convertido en un problema clave para las sociedades democráticas contemporáneas”. Y en concreto, estudia el impacto que ha tenido en ciencia y salud con la pandemia de COVID-19, “fenómeno que se convirtió en foco destacado de la desinformación a escala global”.

El GTM explica que desde comienzos del siglo XXI “se han venido sucediendo maniobras desinformativas principalmente por parte de negacionistas del cambio climático (Kolmes, 2011) y de movimientos contra las vacunas. También se han detectado campañas en defensa de la medicina alternativa y la homeopatía, bulos relacionados con dietas de adelgazamiento supuestamente milagrosas, mensajes infundados en torno a los efectos de los alimentos genéticamente modificados, y asuntos por el estilo. Sin embargo, ninguna de esas polémicas se equipara a la magnitud y efectos que ha alcanzado la desinformación en relación con la pandemia de COVID-19”.

El informe sostiene que en los últimos años, a escala tanto europea como nacional, “se han puesto en marcha diversas iniciativas normativas e institucionales cuyo objetivo es contrarrestar las amenazas de la desinformación. No se trata tanto de perseguir delitos, como de reforzar la seguridad ante los nuevos y variados peligros que acarrea la diseminación masiva y planificada de falsedades, muchos de ellos asociados a injerencias extranjeras”.

Para prevenir la desinformación y minimizar sus efectos, el GTM propone medidas como: