Valentín Fuster. Premio Nacional de Investigación «Gregorio Marañón», en el área de Medicina.

Reconocido por su trabajo a nivel internacional, las contribuciones a la medicina cardiovascular hechas por el doctor Fuster han tenido un enorme impacto en la mejora del tratamiento de pacientes con dolencias cardíacas. Fue premiado con el Premio Príncipe de Asturias de Investigación en 1996 por la contribución de sus trabajos a la mejora de la prevención y el tratamiento de los infartos, destacando sus enseñanzas en el papel de la trombosis y la inflamación en los síndromes coronarios agudos. Ha sido nombrado Doctor Honoris Causa en treinta y siete universidades de prestigio y es el único cardiólogo que ha recibido los máximos galardones de investigación de las cuatro principales organizaciones internacionales de cardiología: la Asociación Americana del Corazón, el Colegio Americano de Cardiología, la Sociedad Europea de Cardiología y la Sociedad Interamericana de Cardiología. Actualmente compagina sus funciones como director general del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC), dependiente del Instituto de Salud Carlos III, con su cargo de director del Instituto Cardiovascular y “Physician-in-Chief“, del Mount Sinai Medical Center de Nueva York.

“Has de estar muy seguro de ti mismo para ser un investigador”, afirma el doctor Fuster, consciente de los “muchos obstáculos” a los que ha tenido que hacer frente en el estudio de las enfermedades cardiovasculares.

El propio doctor Valentín Fuster resume su trayectoria profesional en tres fases: una primera consistente en la investigación del desarrollo de los infartos de miocardio; una segunda sobre la prevención de esta enfermedad; y por último, una etapa de etapa de investigación con tecnología de vanguardia en personas desde su nacimiento hasta los cincuenta años.